"Si tan solo pudiera retroceder el tiempo, cambiaría aquellas cosas que en mi vida no estuvieron bien, aquellas cosas que... al pasar de los dias y los años me marcaron para siempre."
Cuantas veces hemos deseado borrar un dia, un instante, un momento, hasta un año de nuestras vidas a borrarlo todo y vaciar nuestra memoria. Cuantas veces no deseamos volver a ser niños, vivir todo de nuevo, recuperar lo que se fue o dejar que el tiempo ponga las cosas en su lugar. Si desearamos en algún momento perder completamente la memoria y plegarnos por ejemplo a la frase "comenzar de nuevo" ¿cuántas cosas perderíamos? serían como aquellas cosas que se extravían accidentalmente en una mudanza y luego se extrañan, perderíamos el calor del primer beso y la sensación de aquel amanecer que fue perfecto, la nostalgia por amores pasados, la inocencia con la que nos entregamos a lo desconocido, quedarían atras los amigos que iban a ser eternos, las cartas que nos hicieron llorar, la primera o última vez que vimos a un gran amor, los brazos mas cálidos, el día que pensamos que se iba a caer el mundo, el dolor más hermoso, la sonrisa mas esperanzadora, el nacimiento del sentimiento más puro... mientras algunos simplemente no esperan nada del tiempo. Da lo mismo regresar o avanzar, simplemente renuncian a que el tiempo continúe su paso y se marchan con lágrimas y un largo adios.Lo mejor es dejar que el tiempo pase, que siga su curso porque de eso se trata la vida, aprender de los errores, sin importar que tan dolorosas puedan ser, Dios sabe porque hace las cosas, "las cosas tienen su razon de ser" .
A veces dejamos de vivir una vida y un presente que nos da infinitas oportunidades por tan solo soñar con un futuro perfecto que no existe o un pedazo de cielo donde no sabemos que nos espera. Y ahora la pregunta:
¿ valdrá la pena realmente aferrarse al pasado y frustrarse por aquellos errores que simplemente no nos dejan vivir?
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